Existe un auge de nueva formación relacionada con el bilingüismo/idiomas y el cerebro que contribuye a un cambio de paradigma en algunos aspectos de la enseñanza formal de lenguas extranjeras.
La combinación de metodologías, la utilización de diferentes recursos, la gestión de espacios, agrupamientos... todo condiciona el modo en el que nuestro cerebro se aproxima a un idioma.
Por ello , los docentes en general y los de idiomas en particular en enfrentamos a diario al reto de conocer la influencia de nuestras puesta en practica en el aula en los cerebros de nuestros alumnos.
La neurociencia aporta información a este proceso que nos ayuda a mejorar nuesta practica docente. La formación permanente permite al profesorado mantener una actualización constante en ambitos en permanente construcción y deconstrucción.
Los profesores expertos eligen las metodologías apropiadas para cada estudiante basadas en las necesidades individuales de cada uno. Consiguen establecer un exhaustivo “análisis de la brecha”, determinando a dónde quieren que el estudiante vaya, dónde se encuentra ahora, y eligiendo actividades que le ayuden al alumno a llenar sus propios vacíos de conocimientos. Esto significa que los profesores de idiomas más exitosos cuentan con una variedad de actividades en su caja de herramientas y saben cómo seleccionar la intervención más adecuada para cada estudiante. Son maestros que no se dejan llevar por una sola solución de aprendizaje “de talla única” para todos.