Efectivamente, intentar resumir todo un año de retos y vivencias en unos párrafos es harto difícil, especialmente cuando se trata de un año de cambio y de asunción de nuevas responsabilidades en el ámbito de la educación desde la figura de asesora.
Grande ha sido la ilusión y tesón del profesorado por formarse en otras lenguas, como ha sido el caso de la lengua portuguesa (en sus cinco ediciones de curso online), o su ahínco a la hora de compartir inquietudes y recursos en los grupos de trabajo (Flipped Classroom, Portugués em rede, Recursos de profesores de EEOOII), o su interés por actualizarse en aspectos metodológicos (C’est ça la France, Jornadas de formación del profesorado de francés en Castilla y León, Paisagens do Português).
Pero sin duda alguna, la actividad formativa que ha destacado como una eficaz y eficiente herramienta de formación ha sidoel proyecto de innovación Observa_Acción, Comunica_Acción, donde el profesorado participante ha contado con un espacio donde observar, reflexionar y seguir avanzando en la mejora de la labor docente. Esas ventanas y puertas que se han abierto a todos los niveles han insuflado de más entusiasmo y energía , si cabe, en la acometida de nuevos proyectos.
Volviendo la vista atrás, me embarga un sentimiento de agradecimiento a todos los docentes con los que he tenido la oportunidad de compartir vivencias. Me siento privilegiada por haber sido testigo de primera mano de la gran labor que están llevando a cabo, de su valentía para afrontar los cambios, de su flexibilidad para adaptarse a las circunstancias, de su ilusión por que la educación sea cada día un poco mejor, de su tesón e infinita paciencia a la hora de acompañar al alumnado en su proceso de aprendizaje, y, sobre todo, de esa generosidad sin límites con la que se entregan a su quehacer.